Diego Carrasco, alumno del Máster. La innovación en el sector hostelero.
Mi nombre es Diego Carrasco tengo 24 años, soy ecuatoriano y curse la carrera Ingeniería de Empresas Modalidad Dual.
¿Por qué has decidido España para realizar tus estudios?
En primera instancia mi destino era Alemania, debido al origen de mi carrera. Sin embargo, en el camino para la toma de decisión surgió un problema respecto al tiempo de postulación para la beca. No pude llegar a tiempo y desde ese momento empecé a buscar otras opciones. Sin embargo debo confesar que España no estaba dentro de mis planes, pero ha sido uno de mis mayores aciertos desde el punto de vista académico, profesional y cultural.
Dentro de mi país una área que busca desarrollarse en los últimos años es el emprendimiento, sector en el que España tiene grandes retribuciones debido a su buen manejo y uso óptimo de recursos, los cuales son combinados con el talento humano, parte fundamental para el desarrollo de España como un referente mundial. Los conocimientos que posee esta nación son de gran valía para países latinoamericanos en vías de desarrollo e incluso para los que han alcanzado una gran estabilidad.
¿Cómo conociste TecnoCampus y por qué te resultó interesante?
Fue a través de una compañera que estaba realizando la búsqueda de una maestría, empecé a validar datos y a hacer mi propia investigación. Me sorprendió mucho uno de las aspiraciones del TecnoCampus que es: “Crear un espacio donde la universidad y la empresa se dan la mano”. A demás del tema de emprendimiento e innovación, que considero uno de los puntos que deberían ser prioridad en las agendas de los gobernantes de los países latinoamericanos.
¿Cuáles fueron los motivos por los cuales escogiste el Máster en Emprendimiento e Innovación?
Uno de los motivos más fuertes fue el atractivo del conocimiento que podría adquirir en cuanto a conocer más sobre el emprendimiento y su rol en medio de las sociedades emergentes en el desarrollo económico, el papel que juega una microempresa en un país como el mío, Ecuador, ya que podría darme las herramientas necesarias para ser un emprendedor de excelencia a temprana edad. De esta forma poder desarrollar mi proyecto profesional con la microempresa familiar que administro, pero por sobre todas las cosas llevar a otras microempresas a desarrollarse de manera adecuada para enfrentarse un mundo altamente competitivo.
¿Cómo calificarías tu adaptación al nuevo país y al TecnoCampus?
Ha sido fantástica, desde el primer día cuando llegue, sentí la amabilidad de las personas para indicarme la dirección de mi nuevo hogar. A pesar de ser culturas totalmente distintas he podido aprender nuevas maneras de hacer cosas que estaba acostumbrado a realizar de otra forma. La experiencia con TecnoCampus no pudo darse de mejor manera, el servicio al estudiante que ofrecen es de excelente nivel, desde lo universitario hasta el estilo de vida, la ayuda brindada para hacer de esta experiencia un tiempo memorable.
¿Cómo definirías la palabra emprendedor/a?
Lo definiría como esa faceta que cada uno tiene pero que pocos se atreven a conocer por tener miedo a lo desconocido. Para mi va de manera inherente en nuestro estilo de vida, siempre emprendemos, sólo que no sabíamos que tenía ese nombre.
¿Te consideras un emprendedor/a?
No me considero, sé que soy un emprendedor y aunque en mi país es un término que se ha tergiversado su concepto, estoy completamente seguro que el emprendimiento y la innovación serán las herramientas que permitirán construir un mejor por venir.
¿Cuál es tu experiencia como emprendedor y como estudiante?
Mi experiencia como emprendedor ha sido amplia a pesar de mi corta edad. Gracias a la ayuda de un amigo, empecé a emprender en pequeñas actividades que me permitían obtener ingresos para ayudar a pagar la colegiatura. A demás, de empezar a tomar decisiones que tenían alto riesgo, gané dinero, lo invertí y también lo perdí pero lo que siempre estuvo presente fue el deseo de mejorar. Todo esto movido por el ejemplo de mis padres, quienes sin el conocimiento que yo estoy adquiriendo emprendieron un restaurante, que hasta el día de hoy sigue funcionando y el cual deseo adaptar a las nuevas necesidades de este mundo globalizado y competitivo
¿Cuál es tu objetivo al terminar tus estudios?
Al finalizar la maestría tengo en mente la implementación de mi proyecto emprendedor y la creación de un Centro de apoyo Empresarial o la afiliación a alguno ya existente
¿Qué aspectos valoras más y menos de los estudios en TecnoCampus?
Valoro mucho el aporte de los profesores, ya que la mayoría de ellos han emprendido y con su experiencia y los conocimientos que poseen, crean la formula perfecta para un correcto aprendizaje. Las instalaciones del TecnoCampus hacen que esta experiencia sea insuperable, me siento como un campo de entrenamiento intensivo donde contamos con todo lo necesario para ser formados correctamente, desde un Innolab hasta aulas equipadas con tecnología de vanguardia.
¿Qué proyecto te hizo iniciar esta nueva aventura?
Sueño y trabajo por crear un modelo de negocio con este restaurante, que rompa paradigmas en el Ecuador y el mundo dando a conocer que si se quiere lograr resultados distintos es necesario hacer cosas distintas, pero mi mayor sueño es poner al servicio de mi país y al mundo lo poco que puedo conocer pero que es útil para una sola cosa, ser felices, y tener abundancia, lo cual no lo relaciono con la cantidad sino con el poder disfrutar de las cosas que Dios nos ha dado, un trabajo, una profesión, una casa, un carro pero sobretodo una familia.
¿En qué momento surgió tú idea?
Desde que tuve el primer contacto laboral en el restaurante de mis padres, donde empecé a conocer valores, como la disciplina, la solidaridad, la honestidad, la responsabilidad, desde ese momento comencé a interesarme más por el negocio y a pensar en maneras de convertirlo en un referente del sector donde opera.
¿Tienes pensado desarrollar tu proyecto en España o volver a tu país?
Tengo pensado volver para implementar mi proyecto, pero con todo lo vivido en este tiempo veo con buenos ojos la opción de estudiar un doctorado en este país para seguir aprendiendo y también contribuir a la creación de una sociedad del conocimiento que promueva el desarrollo de los países.
Por último, ¿Qué es lo que más te está gustando de esta experiencia?
La proyección y la visión que este ambiente donde la universidad, la empresa y sobretodo la diversidad cultural generan para visualizar un amplio campo de trabajo donde puedo ser un agente de cambio a nivel social, económico y político.